Conflicto en Ucrania
16 septiembre 2014
Original: inglés
El Comité de la Internacional Socialista para la CEI, el Cáucaso y el Mar Negro, reunido en Astana, Kazajstán, los días 15 y 16 de septiembre de 2014, abordó el tema de superar los conflictos y asegurar la paz en la región, prestando una especial atención al actual conflicto en Ucrania. Con participación de sus partidos miembros en Ucrania y en la Federación Rusa, junto con partidos socialdemócratas de otros países de la región, el Comité discutió y acordó la necesidad de poner un rápido fin al conflicto y emitió la siguiente declaración:
La social democracia tiene sus raíces en un movimiento por la paz, y el Comité reafirma que la paz es una condición fundamental para el progreso y la prosperidad de la humanidad. El futuro de la social democracia en la región de la CEI y en todo otro lugar, depende de la prevalencia de la paz. La confrontación militar y la destrucción de vidas se encuentran en total oposición a lo que este movimiento defiende. El Comité afirma que debe atribuirse la máxima prioridad a una reevaluación de las causas de este conflicto, y a examinar la manera en que movimientos como la Internacional Socialista pueden contribuir a lograr poner fin a los conflictos abiertos que nos rodean.
En Ucrania, como en todas partes del mundo, deben prevalecer las consideraciones políticas por sobre el poderío militar. Todos los bandos deben reconocer que la paz es el resultado de un compromiso humano para resolver las diferencias por medios no militares, en lugar de construir una fachada de paz basada en equilibrios de fuerza militar y mutuas amenazas de destrucción, como fue el caso en el pasado. Una tal paz requiere de gran valentía, identificando las verdaderas razones de la confrontación y las maneras por las cuales se pueden superar estos agravios, haciendo uso de compromisos y negociaciones para evitar la pérdida de vidas y la destrucción.
Una importante contribución de la social democracia a este respecto, es impulsar su tarea fundamental de establecer estados-nación modernos, abiertos y democráticos, continuando el histórico papel desempeñado por socialdemócratas en la construcción de los estados.
Al reafirmar las normas y principios sobre los cuales se basa la paz y el nuevo orden internacional que hemos estado construyendo a escala global a través de las últimas dos décadas, necesitamos retornar a la vía de la cooperación regional que se estaba impulsando en años recientes, construida sobre mutuos intereses e interacción. Hoy día se abren nuevas oportunidades para cada uno de los países independientes de la CEI, del Cáucaso y del Mar Negro, tanto dentro de esta región y a nivel global, ya que cada uno de estos estados se encuentra establecido dentro de la comunidad internacional de naciones. Una condición previa para esto, aquí como en todo otro lugar del globo, es el respeto a la integridad territorial de cada país y las relaciones de buena vecindad.
La muerte de más de tres mil personas en Ucrania como resultado directo del conflicto armado, es una tragedia. La prioridad más inmediata y urgente es que el cese de alto el fuego acordado en Minsk a comienzos de este mes entre las partes del conflicto, sea respetado. Además, en nuestra opinión, los otros puntos del acuerdo deben ser implementados a la brevedad posible, con un diálogo nacional inclusivo que reviste especial importancia, al ser la manera en que se logrará el fin a la violencia y una paz duradera. La propuesta recientemente presentada, de asignar mayor autonomía a algunas regiones del sureste de Ucrania, junto con el uso del idioma ruso en la vida pública y privada y en la educación, es un ejemplo del tipo de iniciativa que se requiere.
En nuestra opinión, el papel de todo poder externo y de la comunidad internacional con respecto al conflicto, debe estar guiado por el objetivo de lograr una solución pacífica y rápida, alentando a las partes a entablar negociaciones y contribuir a lograr la solución de las disputas entre ellos.
Debe reconocerse que al centro del conflicto se encuentran los ucranianos, sosteniendo posiciones a diferentes lados del argumento, pero todos ellos sufriendo las consecuencias en el país. El establecimiento de corredores humanitarios bajo observadores internacionales, que entreguen ayuda, alimentos y suministros médicos a todos aquéllos que necesitan asistencia en Ucrania, es un paso urgentemente necesario para aliviar el sufrimiento humano en el país.
La solución del conflicto en Ucrania es primordial para los ciudadanos de ese país, al ser la condición indispensable para restaurar las bases sobre las cuales se afirmará la paz y la estabilidad en la región. La Internacional Socialista continuará ocupándose de esta materia y permanecerá en diálogo con sus partidos miembros en la región.