Solidaridad con Colombia

6 mayo 2021

La Internacional Socialista ha estado siguiendo con profunda consternación la brutal violencia que se ha estado ejerciendo en Colombia en contra de manifestantes, mujeres y hombres, a través de distintas ciudades del país, que han denunciado y rechazado firmemente el proyecto presentado por el presidente Iván Duque de reforma fiscal y aumento de impuestos, que estarían destinados a cubrir el impacto que el Covid-19 ha tenido sobre la economía del país.

Las medidas fueron de inmediato cuestionadas por importantes sectores de la sociedad colombiana y miles de ciudadanos masivamente salieron a las calles a denunciar que los sectores populares y la clase media resultarían los más afectados por ellas. La efervescencia popular viene en cierta medida a ser la continuidad de las movilizaciones sociales que ya se conocieran a fines de 2019 contra las políticas económicas y sociales del gobierno. Las exigencias de mayor igualdad y mejores condiciones de vida por parte de los sectores más desfavorecidos se han mantenido y tras más de un año de pandemia sólo se ha agravado la crisis. El rebrote al que hemos estado asistiendo ahora en Colombia es de la protesta social.

El gobierno ha retirado la medida y el presidente Duque ha llamado al diálogo. Las movilizaciones, sin embargo, no se han detenido y más bien se han reforzado en todo el país contando además con el apoyo de los colombianos y colombianas que viven en el exterior y de otros actores más allá de sus fronteras.

En este contexto, la Internacional Socialista, que apoyará siempre un  diálogo entre los distintos actores políticos y sociales del país,  condena las medidas que impiden o restringen por la fuerza la protesta social antes que buscar restablecer el orden público. El actual contexto de emergencia sanitaria no puede servir de justificación a restricciones arbitrarias, ilegítimas o desmedidas a la libertad de expresión y de reunión, derechos que nunca deben ser conculcados.

La IS hace presente su más enérgico rechazo y condena de la violencia y el uso desmedido de la fuerza en el actuar de grupos policiales. En estos días de movilizaciones ya se han conocido veinticuatro muertos y los heridos están cerca del millar. Las graves acusaciones de actuaciones brutales de los uniformados y de violaciones a los derechos humanos de colombianas y colombianos que han sido víctimas de ellas deben ser esclarecidas con prontitud y las responsabilidades establecidas, y las sanciones que correspondan deben ser aplicadas.

La IS considera que declaraciones como las del ex presidente Uribe, fundador del partido Centro Democrático, hoy en el gobierno, no propician una salida pacífica a la actual crisis y parecieran no asumir el hecho que el país llevó adelante con esfuerzo y constancia un Proceso de Paz concluido en años recientes. En la Colombia del postconflicto, las movilizaciones deben darse en un marco democrático que se reconozcan como expresión de legítimas demandas sociales, el actuar de las fuerzas policiales debe orientarse a la mantención del orden público y no a la criminalización de la protesta, y las vidas y los derechos de todas las colombianas y colombianos deben ser respetados y protegidos por sus gobernantes.   

En estos tiempos difíciles por los que atraviesa el país, la Internacional Socialista expresa su plena solidaridad con el pueblo de Colombia y con su partido miembro, el Partido Liberal Colombiano.