Original: Inglés
La situación en la península de Corea, examinada en detalle por el Presidium de la IS en septiembre de este año y abordada en una declaración emitida en la Sede de la ONU en Nueva York, continúa representando un grave desafío para la comunidad internacional.
El Consejo considera que el desarrollo de armas atómicas por el régimen de Corea del Norte, en violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, amenaza la estabilidad y la paz en Asia y el Pacífico y debe terminar. Acciones agresivas y provocativas de Corea del Norte están teniendo también repercusiones globales y plantean la escalofriante perspectiva de un conflicto entre estados con capacidad de lanzar armas nucleares. Por lo tanto, hacemos un llamamiento a todos los estados en la región y a los Estados Unidos a abstenerse de hacer declaraciones, tomar iniciativas o actividad militar que puedan hacer escalar aún más las tensiones en esa área.
La IS reitera la necesidad de buscar una solución política a las tensiones en la península Coreana, de acuerdo con su fundamental compromiso con la paz y la diplomacia. La IS se esforzará por definir nuevas iniciativas para mitigar esta posible situación catastrófica, trabajando en consulta y diálogo con socios en la península Coreana y actores regionales, incluyendo su partido miembro en Japón y representantes en China, a fin de promover y avanzar una solución que tome en cuenta las vitales implicaciones regionales de las actuales circunstancias.
Los Juegos Olímpicos en PyeongChang, Corea del Sur, en febrero de 2018 ofrecen una oportunidad única para una tregua simbólica, según se establece en la resolución de la ONU adoptada unánimemente el 13 de noviembre de 2017. El consenso para esta resolución incluyó a la República de Corea y a la República Democrática Popular de Corea, como también a los futuros anfitriones de los Juegos Olímpicos: Japón, China, Francia y los Estados Unidos de América.
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