Declaracion
Reunion de la Comision en Londres
19 Noviembre 2007
(Original: inglés)
La Comisión de la Internacional Socialista para una Sociedad Mundial Sostenible reunida en Londres el 19 de noviembre de 2007, acogida por el Primer Ministro Gordon Brown, Líder del Partido Laborista Británico, discutió las prioridades y énfasis necesarios en el trabajo que llevará a cabo sobre los temas medioambientales globales, el cambio climático, las políticas energéticas, y las decisiones sobre gobernanza local, nacional y global, requeridos para hacer frente a estas urgentes cuestiones de nuestro tiempo.
La Comisión dio comienzo a su trabajo subrayando que la comunidad internacional se encuentra en el umbral de una crucial decisión. La Tierra demanda la atención de todos sus habitantes y este es el momento de tomar una acción decisiva que marque una diferencia. El calentamiento del sistema climático en el mundo es un hecho científico indiscutible. Igualmente, el impacto sustancial que produce la actividad humana en el deterioro de la atmósfera terrestre es innegable.
La Comisión es de la opinión que el cambio climático representa el mayor desafío de nuestro tiempo, y el abordarlo constituye la prioridad más vital que enfrentamos. Ningún país por si solo puede encarar este fenómeno, tampoco puede el planeta permitirse dejar a ninguno de ellos atrás. El cambio climático requiere de una respuesta multilateral común, adecuada y efectiva. Esta se logrará sólo mediante una gobernanza apropiada a todos los niveles.
Dos enfoques fundamentales deben converger – por un lado, el científico, y por el otro, el político. Este último debe inspirarse en la voluntad, la visión y el compromiso de construir un futuro sostenible para todos los ciudadanos de todas las naciones; esto es lo que consideramos como la tarea de la Comisión, articular desde el ámbito de la política respuestas que, tomando en cuenta a todos los pueblos, abra el camino a la puesta en marcha de políticas inmediatas y de largo plazo para abordar esta materia.
El cambio climático es una responsabilidad común, y una estrategia general para combatirla debe incluir la solidaridad activa entre países ricos y pobres. El apoyo técnico y económico a países con menor capacidad para reducir las emisiones de gases es por lo tanto necesario. Los compromisos que correspondan a cada país deben estar establecidos sobre los niveles actuales de emisiones y su capacidad económica de reducirlas, bajo el principio de responsabilidad común pero diferenciada y su capacidad respectiva. Los países más ricos con las mayores emisiones deberían reducir éstas en mayor cantidad.
Hoy mas que nunca las naciones, particularmente aquéllas con las mayores emisiones, deben llegar a un acuerdo sobre cómo mitigarlas, cómo adaptarse mejor a la realidad de este cambio que afectará a algunos países, especialmente a los más pobres y vulnerables, y cómo proceder con respecto a futuras transferencias tecnológicas y nuevas formas de financiamiento.
En la opinión de la Comisión, los esfuerzos por limitar las emisiones contaminantes deben ir mano a mano con la lucha contra la pobreza en todo el mundo. Creemos en un modelo que combina el desarrollo económico, la lucha contra la pobreza y la protección al medio ambiente. También creemos que una sociedad sostenible social y ecológicamente, presenta nuevas oportunidades para el crecimiento económico, el empleo, la protección social y asegura una sociedad con mayor cohesión.
Deberá impulsarse un nuevo espíritu de diálogo Norte-Sur, alrededor de las preocupaciones medioambientales y del cambio climático para promover transferencias tecnológicas y financieras y permitir la conservación de las áreas amenazadas de nuestro planeta y la reforestación de otras zonas sobreexplotadas o en riesgo de desertificación.
Un Nuevo Trato con la Naturaleza es necesario para devolver el equilibrio a las relaciones entre los seres humanos y su medio ambiente, como también es necesario un nuevo concepto de gobernanza que refleje la importancia de esta interdependencia.
La próxima Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático que tendrá lugar en el mes de diciembre en Bali, necesita poner en marcha un proceso que lleve a un acuerdo exitoso sobre un conjunto de nuevos compromisos internacionales post-2012. Es esencial, no obstante, que los compromisos adquiridos en Kioto para reducir o estabilizar las emisiones sean cumplidos efectivamente para el año 2012, y deberán realizarse esfuerzos realistas y ambiciosos para obtener un tratado de un régimen post-Kioto que obligue a los países con las mayores emisiones de gas.
La Comisión comparte la idea de que entre los nuevos objetivos a definirse está el de limitar el aumento total de la temperatura global promedio a un máximo de 2 grados sobre el nivel pre-industrial, lo que va unido a una reducción de las emisiones globales de gas de invernadero de por lo menos un 50 por ciento por debajo del nivel de 1990, para el año 2050.
Las medidas que se tomen para combatir el cambio climático en cada país tendrán que incluir inevitablemente un cambio en el modo de vida y una reducción importante de los gases de invernadero. El uso de mecanismos flexibles debe limitarse en el tratado de un régimen post-Kioto. Se requieren asimismo esfuerzos para desarrollar e implementar fuentes energéticas renovables, procurando el menor impacto de éstas sobre el paisaje y los ecosistemas; avanzar el desarrollo de programas de energía eficiente y promover la investigación e implementación de fuentes de energía alternativas a los combustibles fósiles, asumiendo que los modelos existentes tienen una responsabilidad sustantiva en el cambio climático.
La agenda del medio ambiente y la gobernanza global necesita hoy claras definiciones, objetivos y cronogramas; sacrificios compartidos y generosidad colectiva. Ella requiere la participación de todos - ciudadanos, comunidades, instituciones y gobiernos. El objetivo de vivir en una Sociedad Mundial Sostenible que entregue mejores condiciones de vida para todos demanda ahora los esfuerzos, la creatividad y la inteligencia del mundo político, social y científico. Nuestra Comisión se esforzará por contribuir, desde la perspectiva de la política progresista global, al logro de este fin.