Original: inglés
El Consejo de la Internacional Socialista reunido en Ginebra,
Luego de analizar la crisis en Kosovo:
expresa su preocupación por la persistencia de una situación de violencia, inestabilidad y tensión en Kosovo, lo que tiene serias consecuencias para las condiciones de vida de cientos de miles de personas y reitera que la protección de los derechos humanos y la mitigación del sufrimiento debe ser una prioridad de cualquier acción emprendida por cualquiera de las partes involucradas;
subraya que la comunidad internacional debe facilitar un acuerdo dentro de la comunidad albanesa sobre el curso que deben tomar y las negociaciones y sobre su contenido y disuadir a las partes de recomenzar el conflicto armado;
hace un llamamiento tanto a las fuerzas serbias como al Ejército de Liberación de Kosovo (KLA) a cesar todas las actividades militares y toda opresión a los ciudadanos en Kosovo, asegurando el retorno seguro de los refugiados, reconociendo también que la manera de avanzar es a través de medios pacíficos y democráticos;
considera que el clima de entendimiento alentado por la acción de Richard Holbrooke, es un primer paso útil para dar comienzo a negociaciones entre Pristina y Belgrado y urge a las partes a continuar con un compromiso pleno por este camino;
enfatiza una vez más que la crisis en Kosovo podrá encontrar una solución durable solamente basándose en el reconocimiento de formas de autogobierno para Kosovo dentro de la República Federal de Yugoslavia;
subraya asimismo la importancia de las acciones internacionales para obligar a las autoridades yugoslavas a abrir de inmediato el paso a Kosovo y Montenegro a todas las organizaciones humanitarias que prestan asistencia a los refugiados y a su retorno en condiciones de seguridad;
subraya asimismo la importancia de la presencia en Kosovo de 2.000 observadores de la OSCE y hace un llamamiento a las autoridades serbias a cumplir con sus compromisos de dar seguridad a la misión de observadores permitiendo, en casos de amenaza inmediata, acciones por parte de las Fuerzas de Extracción de la OTAN basadas en Macedonia.
Luego de analizar la situación en Bosnia y Herzegovina:
nota con satisfacción que las elecciones parlamentarias y presidenciales fueron realizadas de manera correcta en Bosnia y Herzegovina y enfatiza los buenos resultados logrados por las fuerzas socialdemócratas. Todo esto alienta y refuerza la acción de aquéllos que tienen fe en los Acuerdos de Dayton y en una Bosnia y Herzegovina unida, multiétnica y multicultural;
enfatiza el compromiso de todos los signatarios de los Acuerdos de Dayton de reconocer la soberanía de Bosnia y Herzegovina, y de fortalecer la unidad del Estado y la cohesión entre las comunidades y entidades que lo constituyen;
subraya la responsabilidad de las autoridades y comunidades bosnias de continuar la puesta en marcha de los Acuerdos de Dayton en forma decidida y consistente y promover especialmente el regreso de los refugiados en condiciones de seguridad y dignidad. Una población multiétnica y multicultural viviendo unida, es un objetivo que debe ser alentado y reforzado bajo todas las formas posibles a través del urgente establecimiento en Bosnia y Herzegovina de instituciones gubernamentales a todos los niveles;
urge a las instituciones financieras internacionales a establecer programas de asistencia y reconstrucción para Bosnia y Herzegovina y urge a la Unión Europea a poner en marcha programas de cooperación acordados y firmados por la UE y Bosnia;
apoya plenamente el desarrollo de la opción socialdemócrata y de las fuerzas socialdemócratas en cada entidad de Bosnia y Herzegovina y dará su apoyo para el establecimiento de relaciones más estrechas entre todas las partes que luchan por una Bosnia y Herzegovina unida, independiente, libre, democrática y multiétnica.
Luego de analizar la situación en la región de Europa Sudoriental de manera más general:
expresa preocupación ante algunas tendencias al autoritarismo y urge el desarrollo hacia una total democracia en Croacia, lo que asegurará la aplicación de estándares democráticos recomendados por el Consejo de Europa, y garantizará la libertad de los medios de comunicación contra cualquier limitación a su accionar;
expresa su profunda preocupación por los desarrollos políticos en Serbia, las acciones represivas del régimen de Milosevic y el aumento de la influencia de fuerzas extremistas dentro del gobierno de Serbia, y manifiesta su apoyo a las fuerzas democráticas, a los medios de comunicación independientes y a las universidades, contra cualquier forma de represión;
saluda el resultado de las elecciones en Montenegro y la formación de un nuevo gobierno del cual el Partido Socialdemócrata de Montenegro forma parte, y expresa su esperanza de que ejerzan una influencia positiva en los desarrollos políticos en Serbia y en la República Federal de Yugoslavia;
expresa su satisfacción ante la superación de la crisis de septiembre en Albania y ante el resultado positivo del referéndum constitucional, y urge a todas las fuerzas políticas albanesas a actuar de manera más consistente y práctica para lograr estabilizar la democracia;
urge a la comunidad internacional a cumplir, dentro de los límites de tiempo acordados, los compromisos tomados durante las Conferencias Ministeriales y de Donantes;
destaca la importancia de alentar la estabilidad en Macedonia;
subraya la utilidad de apoyar toda forma de cooperación regional -tal como la Iniciativa de Cooperación Sudoriental (SECI), Royaumont, y el Consejo de Cooperación del Mar Negro- que tenga por objeto la creación de mayores oportunidades para la interdependencia e integración de pueblos y países que han estado, por razones históricas, en conflicto entre ellos.
Finalmente, el Consejo:
afirma que la estabilización política en Europa Central y Oriental es un requisito previo para lograr estabilidad y seguridad en todo el continente;
subraya la naturaleza estratégica de la integración europea que puede ofrecer a Europa Central y Oriental un punto de referencia esencial para ayudar a completar su transformación política y económica en una Europa que será democrática, pacífica, socialmente justa y basada en los principios de la solidaridad mutua y la cooperación entre las regiones;
saluda el comienzo de las negociaciones con Eslovenia, Hungría, Polonia, la República Checa, Estonia y Chipre, y urge que se de comienzo a negociaciones tan pronto como sea posible con Bulgaria, Rumania, Letonia, Lituania y la República Eslovaca, y enfatiza que la Unión Europea debe perseguir también una estrategia de integración con los países que aún no son candidatos, mediante la firma de acuerdos de cooperación;
reitera su compromiso de apoyar todas las fuerzas socialdemócratas en Europa Central y Oriental y urge a los partidos miembros de la IS a continuar apoyando el desarrollo del proceso democrático en la región, a través de todos los medios técnicos y políticos posible.